Cada vez hay más conciencia en que el aislamiento acústico en Valencia no es solo una cuestión de confort en el hogar, sino que se trata de un servicio que ofrecemos en nuestra empresa que preserva la salud de los habitantes de la vivienda, dadas las nefastas consecuencias que tiene el ruido para la salud, un asunto que vamos a abordar en las siguientes líneas de nuestro blog.

Al margen de la percepción del ruido que cada uno tenga y de la satisfacción que pueda producir, por ejemplo, una música alta o el ruido de una moto, lo cierto es que en Ignifoc sabemos que no son buenos para la salud, especialmente si estamos hablando de niveles entre 75 y 125 decibelios, baremo en el cual la capacidad auditiva comienza a deteriorarse. Por encima de esos niveles de ruido, incluso pasa por ser doloroso y se comienza a tener peligro de sordera en caso de ruidos extremos.

Pero lo que también se busca con el aislamiento acústico en Valencia es evitar todo tipo de ruidos, también los menores, que en niveles constantes también resultan nocivos para la salud. Estamos hablando de que el ruido afecta, por ejemplo, al sistema cardiovascular, provocando alteraciones del ritmo cardíaco, riesgo coronario, hipertensión arterial y excitabilidad vascular por efectos de carácter neurovegetativo.

Por supuesto, es habitual el aumento del estrés producto de ruidos de vecinos que no podemos controlar, aumento de alteraciones mentales, tendencia a actitudes agresivas o dificultades de observación, concentración y rendimiento. Sin olvidar que el ruido también puede afectar a las glándulas endocrinas y al aparato digestivo, con incremento de enfermedad gastroduodenal por dificultar el descanso, entre otros efectos.